Durante el tercer trimestre de 2025, Yucatán registró una baja en la proporción de habitantes cuyos ingresos laborales son insuficientes para adquirir la canasta alimentaria. El reporte más reciente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) señala que el indicador estatal disminuyó 2.1 puntos porcentuales respecto al periodo inmediato anterior, lo que coloca a la entidad entre las que muestran una tendencia favorable en la región.
El informe destaca que la pobreza laboral mide cuántas personas dependen de su salario para cubrir productos básicos y, sin embargo, no alcanzan el nivel mínimo requerido. En el caso de Yucatán, el descenso observado ese trimestre refleja una mejora en el poder adquisitivo de la población ocupada y una recuperación paulatina tras periodos de estancamiento económico.
A nivel nacional también se reportaron disminuciones, aunque con una variación menor. El indicador en el país se ubicó en 34.3%, impulsado principalmente por los resultados obtenidos en zonas urbanas y por un incremento en el ingreso promedio mensual registrado durante el trimestre, según el organismo estadístico.
Los datos muestran que, dentro de la península, Yucatán presentó la disminución más marcada en términos de pobreza laboral, por encima de Quintana Roo y Campeche, que también reportaron retrocesos en este indicador. Para el Inegi, esto evidencia un entorno regional que comienza a mostrar signos de recuperación en el mercado laboral.
El reporte puntualiza que 24 entidades del país presentaron una baja en pobreza laboral durante el periodo de referencia, aunque persisten contrastes entre los ingresos de trabajadores formales e informales. En algunos estados, como Veracruz, Chihuahua y San Luis Potosí, se registraron incrementos que evidencian condiciones desiguales en el mercado laboral nacional.
Especialistas apuntan que la evolución de la pobreza laboral en Yucatán dependerá de factores como el comportamiento de la inflación, la creación de empleo formal y el dinamismo de actividades locales. El panorama económico seguirá sujeto al desempeño de sectores estratégicos como el turismo y los servicios, que concentran una parte significativa de la actividad productiva estatal.






