De acuerdo con la información recabada durante la masiva concentración de visitantes con motivo del equinoccio de primavera en Chichén Itzá, algunos visitantes que fueron a Ek Balam con fines de paseo familiar, se encontraron el domingo 19 de marzo pasado con un fuerte dispositivo de vigilancia de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y un equipo de especialistas de la Policía Estatal de Investigación (PEI) que mantuvieron cerrada la zona arqueológica para la realización de las pesquisas, recolecta de información y de testimonios de las víctimas.
Los delincuentes llegaron en momentos en que la zona arqueológica estaba cerrada al público, por lo que apenas estaban algunos empleados del INAH y de Cultur. Los trabajadores fueron sometidos a punta de armas de fuego, los amarraron, amordazaron y amenazaron con las armas para que no opusieran resistencia.
Sin ninguna resistencia, el grupo delictivo se robó la caja fuerte del Patronato Cultur que presuntamente contenía una fuerte cantidad de dinero y documentos de alto valor.