El gobierno de Yucatán anunció la aplicación automática de un estímulo fiscal que impedirá que micro y pequeños negocios paguen el incremento al Impuesto Sobre Nómina (ISN) aprobado para 2026. La medida surgió tras las reuniones que el Ejecutivo estatal sostuvo con 19 cámaras empresariales, donde los representantes advirtieron el impacto que tendría el ajuste en el sector.
Según la autoridad estatal, el beneficio permitirá mantener en 3 por ciento la tasa efectiva del ISN, pese a que el presupuesto prevé elevarla a 3.75 por ciento. Las empresas no deberán realizar trámites ni solicitar autorizaciones para acceder al estímulo, el cual se descontará directamente cuando presenten su declaración fiscal.
El acuerdo responde a preocupaciones expresadas por el sector privado sobre el encarecimiento de costos laborales y la desigualdad entre negocios de distinta escala. Se estima que aproximadamente 900 empresas sí enfrentarán el incremento, mientras que la mayoría quedará excluida al ser consideradas micro o pequeñas.
En paralelo, el gobierno informó que los programas de financiamiento para pequeños comercios incluyen como condición el tránsito hacia la formalidad. Con ello se busca atender una de las demandas planteadas por el empresariado: reducir la competencia desleal generada por la informalidad y fortalecer la recaudación local.
Entre los compromisos anunciados también se encuentra un proceso de simplificación de trámites fiscales, enfocado en el Registro Estatal de Contribuyentes. La administración estatal afirmó que estos ajustes buscan facilitar la operación de las empresas y reducir cargas burocráticas para quienes cumplen con sus obligaciones.
