A más de un año de desaparecer, Miguel Ángel y Ricardo Acosta Arcique continúan sin ser localizados en el fraccionamiento Dzoyolá, en Kanasín. Vecinos y conocidos siguen compartiendo información con la esperanza de aportar datos que permitan encontrarlos.
Miguel Ángel mide 1.70 metros, tiene complexión delgada y tez morena clara. El día de su desaparición vestía playera negra lisa, pantalón beige y tenis blancos con negro. Ricardo, de 1.62 metros, tez morena, cabello ondulado negro y ojos cafés, llevaba playera roja con estampado de ranas, pantalón beige y tenis negros.
Ambos fueron vistos por última vez el 24 de marzo de 2024, y desde entonces no hay indicios sobre su paradero. La familia y la comunidad mantienen la alerta y buscan cualquier señal que permita avanzar en la localización.
Los familiares han solicitado apoyo de la ciudadanía para reunir información que pueda ser útil a las autoridades. Cada dato es considerado valioso para esclarecer la desaparición de los jóvenes.
La investigación sigue abierta y se revisan testimonios, posibles avistamientos y zonas cercanas al fraccionamiento. Las autoridades continúan trabajando para dar con Miguel Ángel y Ricardo.
El caso permanece vigente, mientras familiares, vecinos y conocidos esperan que surjan pistas que ayuden a esclarecer lo ocurrido y permitan reunir a los hermanos con sus seres queridos.






