Un grupo de maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) instaló un plantón frente al Palacio de Gobierno en Mérida, como parte de una protesta que busca llamar la atención sobre las condiciones laborales del magisterio y la petición de derogar la Ley del ISSSTE 2007. La acción se replica en varios municipios del estado, demostrando la determinación del sector para impulsar cambios urgentes.
Campamentos similares se han establecido en localidades como Valladolid, Tekax y Ticul, donde los docentes se organizan en turnos para mantener una presencia constante. Aunque visible y firme, la movilización ha tenido un impacto limitado en el sistema educativo estatal. La Secretaría de Educación del Gobierno del Estado (Segey) informó que solo el 10% de las escuelas de nivel básico suspendieron clases, y no se han registrado interrupciones en el nivel medio superior.
Las exigencias de los manifestantes están claramente definidas en un pliego petitorio que fue leído durante el inicio de la protesta. Entre las principales demandas figuran la abrogación de la Ley del ISSSTE 2007, la eliminación del sistema de Afores, el regreso al modelo solidario de pensiones y un aumento salarial del 100% al sueldo base.
Magaly Rodríguez Casanova, representante del movimiento en Mérida y docente de educación inicial indígena, enfatizó que el sistema actual de jubilación perjudica a los trabajadores del sector. “La ley que actualmente nos rige impone condiciones inequitativas. Estamos pidiendo que se nos reconozca con un esquema de retiro justo, basado en salarios mínimos y no en unidades de medida que reducen nuestras pensiones”, señaló.
Además, los profesores manifestaron su rechazo a la Reforma Educativa aplicada en gobiernos anteriores, al considerarla una medida que ha deteriorado sus derechos laborales. También exigieron la eliminación del régimen de excepción laboral, al que consideran discriminatorio.
Aunque el plantón se mantiene de manera pacífica, los docentes no descartan incrementar las acciones si sus demandas continúan sin respuesta. La CNTE ha reiterado que esta movilización es parte de una jornada nacional que se mantendrá activa hasta obtener compromisos claros por parte de las autoridades.
“Estamos aquí porque creemos en la educación pública y en la dignidad del trabajo docente”, concluyó Rodríguez Casanova. “Nuestro mensaje es firme: no pedimos privilegios, exigimos justicia laboral”.






