En un acto de protesta simbólica, más de 300 afectados por supuestas prácticas fraudulentas de la empresa Préstamos Yucatán clausuraron este jueves el local donde opera el negocio. Los denunciantes aseguran que, tras solicitar préstamos pequeños de entre 5 mil y 10 mil pesos, ahora enfrentan deudas que se han multiplicado hasta diez veces, poniendo en riesgo incluso sus viviendas.
La problemática ha escalado al punto que las víctimas han llevado sus reclamos ante instancias gubernamentales. Tras presentarse días atrás en el Congreso del Estado, este jueves acudieron a Palacio de Gobierno para demandar intervención y soluciones frente a esta situación que afecta a cientos de familias.
El abogado Gabriel Cabrera, quien acompaña a los afectados, anunció que se está trabajando en la integración de expedientes colectivos para consolidar las denuncias y promover las investigaciones correspondientes. Además, hizo un llamado a las autoridades estatales para que actúen con prontitud, esclarezcan los hechos y apoyen a quienes se encuentran en vulnerabilidad.
La clausura simbólica del local pretende visibilizar el impacto del fraude y exigir que se ponga fin a estas prácticas que se aprovechan de la urgencia económica de la población. Mientras tanto, los afectados continúan organizándose en busca de justicia y respaldo institucional.
